La ruta discurre por los términos de Guadamur y Polán, asentados en la conocida como Meseta Cristalina de Toledo, en la margen izquierda del Tajo.
Recorre las tierras de labor en las que predominan olivos cornicabra y nuevas plantaciones de picudo, salpicadas por explotaciones ganaderas.
Protagonistas de esta ruta son el yacimiento arqueológico de Guarrazar (s. VI), el castillo de Gadamur (s. XV), las torres de la antigua fortaleza de Polán (XII) y la Torre de Cervatos (XII). Estos señoriales tesoros nos hablan de mil batallas, peregrinos y acontecimientos históricos.